Itinerario
Jaraba - Ibdes - Nuévalos
Descripción
El itinerario parte desde Jaraba, concretamente en el peirón de San
Vicente (760 m), junto a la parada del autobús. Durante esta primera
parte de la etapa el GR 24 coincide con el tramo 1 del PR-Z 90. De esta
forma se sigue de frente para tomar la carretera Z-453 en dirección a
Ibdes, y enseguida hay que continuar a la derecha por un camino entre
huertas que, en unos 400 m, sale a la A-2501 que lleva a Campillo de
Aragón, a la altura de una embotelladora de aguas. Cruzando el asfalto,
se llega a una pista de tierra junto a la margen del Mesa, conocida como
el camino de La Serna (0,7 km; 8 min).
Hasta Ibdes se marcha por este vial, que discurre al pie de los conglomerados en los que el río ha labrado su cauce. Llana y sin pérdida posible, cuenta con una enorme atractivo natural y etnológico.
Hacia la izquierda, se contempla la fértil vega del Mesa, un mosaico de huertas y campos entre los que el curso del río está delimitado por una orla de sauces y chopos. En este entorno habitan numerosas aves, como el martín pescador, el mirlo o el abejaruco. A la derecha, el gran paredón junto al que se camina destaca por sus diversas formas de relieve, desde tafonis (pequeños huecos en la roca) a oquedades que el hombre ha aprovechado, cerrándolas, como parideras y colmenas.
Ejemplo destacado de erosión es la gran formación turricular conocida como la Torrecilla (2,3 km; 30 min), medio escondida a la derecha del camino, entre los pinos plantados para sujetar el terreno.
El paisaje se hace más abierto en las inmediaciones de Ibdes. Cerca de un antiguo pozo de hielo restaurado se llega a un cruce de caminos (6,6 km; 1 h 20 min). Hacia la derecha, el GR 24 sigue hacia Nuévalos o hacia Llumes, y a la izquierda entra en el casco urbano de Ibdes (717 m; 7,3 km; 1 h 30 min) y enlaza con el tramo 1 del sendero PR-Z 90 que se dirige a Godojos.
El pueblo, presidido por su monumental iglesia de San Miguel, conserva su trazado morisco, y ofrece interesantes elementos etnográficos, como viviendas excavadas en la roca; así como un atractivo paisaje junto al río Mesa, con grutas visitables.
Desde el cruce, el GR 24 deja de coincidir con el PR-Z 90 y llega enseguida a un nuevo nudo (8,4 km; 1 h 40 min), en el que se separan los caminos a Llumes y Nuévalos. Éste último sigue hacia la izquierda, atravesando una zona de campos de cultivo con distintas bifurcaciones indicadas, aunque siempre se mantiene la orientación E.
El camino gana altura y deja atrás el ambiente húmedo de la vega del río, con lo que los cultivos de regadío se sustituyen por otros de secano, como almendros, y más adelante por la característica vegetación esteparia de arbustos aromáticos.
Un poco más adelante se alcanza el inicio de la subida cerrillo de los Frailes (10,6 km; 2 h 15 min), desde donde se tiene una excelente vista del río Piedra, Nuévalos y el embalse de la Tranquera.
Aquí, el sendero se divide en varios ramales. Por el camino que se dirige hacia el SO se puede llegar hasta el parque del Monasterio de Piedra, pero atravesando un camino sin indicar, al ser de propiedad privada. El GR 24, mantiene su rumbo y baja hasta la ribera del río, por una senda bien marcada que sigue el curso del barranco de Valdecaballos.
El sendero balizado cruza el Piedra por un puente y continúa por la margen derecha del río, que en este tramo fluye encajado en una estrecha garganta, donde crecen especies como álamos, hiedras o juncos. Por este umbroso paraje, se llega hasta el atractivo casco urbano de Núevalos (724 m; 12,9 km; 2 h 55 min), alzado en un espolón rocoso. Aquí, se enlaza con el tramo 5 del PR-Z 92.
Hasta Ibdes se marcha por este vial, que discurre al pie de los conglomerados en los que el río ha labrado su cauce. Llana y sin pérdida posible, cuenta con una enorme atractivo natural y etnológico.
Hacia la izquierda, se contempla la fértil vega del Mesa, un mosaico de huertas y campos entre los que el curso del río está delimitado por una orla de sauces y chopos. En este entorno habitan numerosas aves, como el martín pescador, el mirlo o el abejaruco. A la derecha, el gran paredón junto al que se camina destaca por sus diversas formas de relieve, desde tafonis (pequeños huecos en la roca) a oquedades que el hombre ha aprovechado, cerrándolas, como parideras y colmenas.
Ejemplo destacado de erosión es la gran formación turricular conocida como la Torrecilla (2,3 km; 30 min), medio escondida a la derecha del camino, entre los pinos plantados para sujetar el terreno.
El paisaje se hace más abierto en las inmediaciones de Ibdes. Cerca de un antiguo pozo de hielo restaurado se llega a un cruce de caminos (6,6 km; 1 h 20 min). Hacia la derecha, el GR 24 sigue hacia Nuévalos o hacia Llumes, y a la izquierda entra en el casco urbano de Ibdes (717 m; 7,3 km; 1 h 30 min) y enlaza con el tramo 1 del sendero PR-Z 90 que se dirige a Godojos.
El pueblo, presidido por su monumental iglesia de San Miguel, conserva su trazado morisco, y ofrece interesantes elementos etnográficos, como viviendas excavadas en la roca; así como un atractivo paisaje junto al río Mesa, con grutas visitables.
Desde el cruce, el GR 24 deja de coincidir con el PR-Z 90 y llega enseguida a un nuevo nudo (8,4 km; 1 h 40 min), en el que se separan los caminos a Llumes y Nuévalos. Éste último sigue hacia la izquierda, atravesando una zona de campos de cultivo con distintas bifurcaciones indicadas, aunque siempre se mantiene la orientación E.
El camino gana altura y deja atrás el ambiente húmedo de la vega del río, con lo que los cultivos de regadío se sustituyen por otros de secano, como almendros, y más adelante por la característica vegetación esteparia de arbustos aromáticos.
Un poco más adelante se alcanza el inicio de la subida cerrillo de los Frailes (10,6 km; 2 h 15 min), desde donde se tiene una excelente vista del río Piedra, Nuévalos y el embalse de la Tranquera.
Aquí, el sendero se divide en varios ramales. Por el camino que se dirige hacia el SO se puede llegar hasta el parque del Monasterio de Piedra, pero atravesando un camino sin indicar, al ser de propiedad privada. El GR 24, mantiene su rumbo y baja hasta la ribera del río, por una senda bien marcada que sigue el curso del barranco de Valdecaballos.
El sendero balizado cruza el Piedra por un puente y continúa por la margen derecha del río, que en este tramo fluye encajado en una estrecha garganta, donde crecen especies como álamos, hiedras o juncos. Por este umbroso paraje, se llega hasta el atractivo casco urbano de Núevalos (724 m; 12,9 km; 2 h 55 min), alzado en un espolón rocoso. Aquí, se enlaza con el tramo 5 del PR-Z 92.
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