¿Como cebar? Esta pregunta nos surge
siempre que pescamos por primera vez en un embalse y sinceramente es
difícil de contestar. La verdad es que existen muchas técnicas de cebado
de las cuales vamos a explicaros unas cuantas, esto no significa que
sean infalibles pero nos pueden ayudar bastante. El cebado resulta
imprescindible en esta modalidad de pesca, con el pretendemos atraer a
nuestro puesto el mayor numero de peces grandes y que permanezcan en la
zona el mayor tiempo posible.
CEBADO TIPICO
Se
coloca una boya a la distancia deseada, alrededor de ella haremos un
cebado concentrado que no será mayor que 5 x 5 m. Pondremos uno de
nuestros cebos en medio del cebado y el otro al borde del cebadero. Con
este tipo de cebado conseguiremos que el pez de fácilmente con el cebo
colocado en el medio del cebado, el segundo cebo al borde del cebadero
esta destinado a peces algo mas cuidadosos que no entran a comer en el
tumulto, esta segundo cebo es conveniente colocarlo durante las jornadas
de pesca a diferentes lados del cebadero.
CEBADO SIEMBRA
Este
tipo de cebado es similar al típico, con la única diferencia que la
zona de cebado será mucho mas amplia. La cantidad de cebo a utilizar es
la misma simplemente dispersarla mas, si se desea se pueden utilizar
partículas o boilies de menor tamaño. Los dos cebos serán colocados
dentro de la zona cebada. Con este tipo de cebado conseguiremos mantener
a los peces durante más tiempo en la zona buscando el alimento, el
factor negativo es que a mayor superficie cebada más difícil será que
encuentren nuestro cebo, por lo cual no es recomendable hacer un
cebadero demasiado grande.
CEBADO DE DISTRACCIÓN
En
aguas con gran numero de carpas medianas, podemos optar por montar un
cebadero exclusivamente para mantener distraído al jardín de infancia
(partículas pequeñas, cañamón, etc...), mientras nosotros pescamos en
otro cebadero hecho con boilies grandes, habas o maíz gigante que
situaremos a unos 20 metros del otro. Evidentemente no podremos evitar
que peces medianos muerdan nuestro cebo, pero es la única forma de poder
pescar en este tipo de aguas.
CEBADO LINEAL
A
partir de cierta distancia de la orilla se comienza a hacer una línea,
la anchura y la longitud de la misma depende del gusto del pescador. Con
este tipo de cebado pretendemos cortar el paso a los peces y hacerles
entrar en la línea, es muy apropiado en embalses de poca anchura. El
único inconveniente de este cebado es que con facilidad nuestros hilos
se puedan cruzar y provocar enredos.
CEBADO GRADUAL
Se
hace una línea con un ángulo de 30 o 45 grados, este método tiene la
misma función que el cebado en línea con la ventaja de evitar enredos.
Para realizarlo correctamente colocaremos antes dos boyas que nos
marcaran la distancia y dirección de la línea.
CEBADO EN “Y”
Sin
ninguna duda uno de los cebados más efectivos. Con esta forma en “Y”
podremos interceptar todas las carpas no importa de la dirección de la
que provengan, todas irán a parar al centro. Esta forma evidentemente es
la más complicada de realizar y necesitaremos una embarcación para
hacerlo. Se pueden utilizar varias boyas para señalizar la forma de Y,
pero para evitar enganches con las boyas normalmente utilizamos una sola
boya que señaliza el centro, el resto de los puntos los fijaremos
visualmente con objetos como árboles, casas o postes que se encuentren
en la orilla.
CEBADO ENCOGIDO
Primeramente
realizaremos un cebado muy extenso esparciendo los boilies y las
partículas sobre una superficie de 30 x 30 metros. Ofreceremos nuestros
cebos dentro de toda esta zona, probando en cada lance una zona
diferente. Según vayamos observando que en una zona determinada el
numero de picadas es mayor que en el otro, iremos reduciendo poco a poco
la superficie de cebado, acabando finalmente en un cebado típico. Este
tipo de cebado es muy práctico en embalses poco conocidos, donde
desconocemos los comederos naturales o carecemos de una sonda para ver
el fondo y el movimiento de los peces.
Todas
estas técnicas no nos servirán de nada si no hemos elegido previamente
el lugar adecuado para hacerlo, la localización de los lugares
habituales de paso, los comederos naturales, la profundidad, la época
del año y el cebo elegido será la clave del éxito. Todos los embalses
son diferentes, la técnica utilizada en uno de ellos no tiene porque ser
eficiente en el otro y solo a base de experiencia y observación
obtendremos resultados. Hemos pescado en muchos embalses diferentes, en
algunos sabemos que existen ejemplares de gran tamaño, pero a pesar de
que hemos probado todo tipo de cebos y cebados no hemos conseguido
pescarlos. Esto no debe desanimarnos, al contrario, el hecho de
encontrar el secreto de un embalse debe motivarnos doblemente. La
satisfacción de tener en nuestras manos una carpa grande y saber que ha
sido gracias a nuestros esfuerzos, nuestro valor de experimentar, de
observar, tener perseverancia y creer en lo que estamos haciendo.
¿CUANDO CEBAR?
Siempre
que nos sea posible, debemos cebar con antelación el lugar donde
tenemos pensado pescar. Con el factor tiempo, podemos ir acostumbrando
poco a poco a las carpas para que coman en nuestro pesquil y acepten
nuestros cebos. Todas las carpas no son iguales, algunas son muy
confiadas pero otras no lo son. Cuando
un grupo de carpas encuentra una zona cebada, algunas empezarán a
alimentarse inmediatamente, mientras que la otra parte del grupo,
recelará y se mantendrá a la expectativa. Tal vez estas últimas ni
siquiera entren en la zona cebada y se queden en la periferia. Lejos del
bullicio que montan las otras carpas en la zona cebada, puede que estas
carpas tan cautas no recelen de un cebo puesto fuera de la zona de
cebado. Si vamos cebando metódicamente desde algunas semanas antes a la
fecha de la jornada de pesca, daremos tiempo a que las carpas que más
desconfían puedan entrar al cebo. Esto ocurre porque la presencia de
carpas comiendo estimula, con el tiempo, a que todo el grupo se “siente a
la mesa”. En cambio, si efectuamos un cebado cuando llegamos preparados
para pescar, podremos hacernos con las carpas confiadas que entren en
seguida a nuestro pesquil, pero jamás nos picarán las carpas que
desconfían, pues con el revuelo que se produce cuando hay una picada, se
espantarán. Tampoco tendremos a nuestro favor el estimulo de que las
carpas desconfiadas vean a sus compañeras comer con tranquilidad, porque
¡las estamos pescando! Otros factores negativos son las líneas
tendidas, con las que pueden rozar las carpas y asustarse, y los ruidos
que podamos hacer desde la orilla. De todas maneras, una cosa es el
cebado ideal y otra muy distinta lo que podamos hacer realmente, porque
no siempre tenemos ese tiempo necesario para preparar con antelación un
puesto, o el embalse está situado a muchos Km. y no vamos a estar
pegándonos palizas con el coche…. Así pues, en muchos casos no tendremos
mejor opción que acercarnos al lugar dos o tres días antes y echar unos
cubos de cebado.
¿CUANTO CEBAR?
Es una buena pregunta con una muy difícil respuesta. Aquí se puede aplicar el dicho de que “cada maestrillo tiene su librillo”. En
el caso de que vayamos a cebar con mucha antelación, deberíamos
utilizar mucha cantidad de cebado y extenderlo por la mayor superficie
posible, para llegar al máximo de carpas del embalse. Cercana ya la
fecha de la sesión de pesca iremos concentrando el cebado en nuestro
pesquil. Como ejemplo particular, nosotros estamos realizando este
trabajo en un pequeño embalse de unos 4 Hm. Como somos varios pescadores
los que formamos el grupo de Webcarp, vamos turnándonos metódicamente
para ir cebando todas las semanas. Cada vez que cebamos llevamos un
mínimo de 10 Kg. de mezcla de granos, semillas y boilies. Nuestro
interés concreto en este embalse es habituar a los peces a que coman en
nuestro pesquil, para que prefieran estar buscando comida en nuestra
zona antes de ir a por ella en otras zonas del embalse. Cuando podemos
cebar solo una vez antes de ir a pescar (circunstancia bastante común),
preferimos hacerlo con tres días de antelación. Por ejemplo, si la
sesión de pesca cae en fin de semana, quedamos para cebar el miércoles.
En este caso solemos echar unos 15 Kg. al agua. Ahora
estamos hablando de cantidad por puesto de pesca, pues directamente
vamos a concentrar el cebo en los pesquiles correspondientes. Cuando
llega el día de la pesca, lo primero es montar la barca y a cebar. El
primer cebado siempre es más grande: 5 Kg. por puesto. Después la
cantidad empleada es menor, unos 3 Kg. aproximadamente. ¿En qué momento
solemos cebar? Por la mañana, esperamos a que avance un poco el día,
pues es posiblemente el mejor momento para que piquen y no vamos a
estropearlo echando la barca al agua y armando jaleo. De 8:30 a 9:00
solemos salir. El otro momento del día que elegimos es sobre las 8 de la
tarde. Si entre cebado y cebado las picadas son muy abundantes, podemos
pensar en cebar un poco más. Si esto ocurre debemos pensar que hay
muchas carpas en el sector y están acabando con nuestro cebado. En este
caso solemos cebar con boilies, un puñadito después de cada picada es
suficiente para reponer el cebado.
CARPAS Y CARPAS…
En
un embalse la población de carpas puede tener hábitos diferentes. Hay
carpas que van recorriendo el embalse, siguiendo día tras día la misma
ruta. Tenemos carpas residentes en una zona concreta del embalse,
desplazándose buscando comida pero sin salir de los límites de su
sector. Por último, también nos podemos encontrar con carpas solitarias
que permanecen siempre en una zona concreta de poca extensión. El cebado
actúa de diferentes modos según el caso que se trate. Las carpas
viajeras encuentran la comida servida en medio de su trayecto y se
detienen a hacer un “piscolabis”, tras el cual seguirán su ruta. Las
carpas de un sector pronto encontrarán el cebado y acudirán a nuestro
pesquil. La carpa solitaria será más difícil de tentar sin un cebado
localizado en su refugio, pero puede verse atraída por el alboroto que
darán las otras carpas en el cebadero.
CARPAS Y EMBALSES
A
la hora de pescar en un embalse deberemos tomar en cuenta varios
factores. El tamaño del mismo y el número de carpas pequeñas. En
embalses grandes deberemos cebar con varios días de antelación, si
además hay muchas carpas pequeñas es conveniente cebar mas cantidad y
sobre todo partículas grandes como el haba, boilies y con chufa que es
mas difícil de digerir.
LOS CAMBIOS DE ESTACION
¡Cuidado
con los cambios de estación! En invierno las carpas están menos activas
y solo se alimentan pocas veces al día y durante un espacio de tiempo
muy corto. El cebado será escaso y muy concentrado alrededor del
anzuelo. En primavera y empezando el otoño las carpas se buscan comida
afanosamente, será el momento de cebar en mayor cantidad. En verano
actuaremos sobre la marcha: si las carpas están perezosas por el
excesivo calor y la falta de oxígeno, el cebado será más reducido; si
nos encontramos con que hay mucha actividad en la zona, cebaremos más
copiosamente.
LA BOYA
En
una sesión de pesca debemos cebar con método y precisión. Para ello es
útil señalizar el pesquil con una boya. Cebaremos a unos 10 m. de ella,
con el método que hayamos elegido. Así tendremos una referencia para los
cebados posteriores y para lanzar las cañas exactamente a la zona
cebada.
HERRAMIENTAS PARA CEBAR
La
herramienta más útil para cebar con semillas y granos es la barca. Nos
permitirá llagar a la zona marcada con la boya y extender el cebado con
cierta precisión. También podemos utilizar un cohete o spot, cilindro
que llenamos de cebo y lanzamos con una caña fuerte. Al golpear en el
agua el cohete libera su contenido y ya podemos recogerlo. Si el pesquil
no está muy lejos podemos utilizar el común tirachinas. Por último,
para cebar con boilies nada más útil que un Cobra, tubo en el que
deslizamos uno o varios boilies y los lanzamos con un movimiento rápido a
gran distancia.
GRANOS O BOILIES
Como
ya hemos dicho, nos referimos a pescar en unas aguas cuyos peces no
conozcan nuestro cebo preferido: el boilie. Insistimos una vez más en
que el boilie no es un cebo rápido. Es un buen cebo por
condicionamiento, el pez lo va conociendo y valorándolo cada vez más. Si
queremos un cebo que sea instantáneamente reconocido por el pez como
comida y sea devorado rápidamente, los mejores son el maíz, la famosa
patata o los cacahuetes. Por tanto, es obvio que en un embalse virgen
obtendremos mejores resultados con cualquiera de estos últimos. Pero las
cosas empezaran a cambiar conforme vayamos cebando, poco a poco los
boilies irán introduciéndose en la dieta de la carpa. Cuanto más tiempo
cebemos y ¡ojo!, no pesquemos, mejores serán los resultados. Hay que
sembrar para después cosechar. Cuanto más tiempo se alimente la carpa de
los boilies, sin sufrir el anzuelo, con más confianza aceptará este
cebo.
BOILIES ADECUADOS
Ahora
bien, ¿son igual de validos todos los boilies para introducirlos en
aguas vírgenes? No. Está demostrado que uno de los estimulantes de
apetito que mas influye en las carpas es el azúcar. Los boilies dulces
nos darán resultados más rápidos. Además, ricos en hidratos de carbono y
con poco contenido proteínico, son fácilmente asimilables por el
sistema digestivo del pez. Otro de los componentes de los boilies que
pueden ayudar a la rápida aceptación es el “birdfood”. Los
boilies que lo incluyen en su composición resultan más porosos, con lo
que una vez sumergidos en el agua, la difusión de los atrayentes será
mayor. Además tenemos el efecto “crackante”: el pez notará las semillas
cuando machaca el boilie con sus dientes faringeos. Es como cuando
nosotros comemos cacahuetes y vamos machacándolos con los dientes para
hacer los trocitos cada vez más pequeños. Yo prefiero hacerme mis
propios boilies, y un método que sigo para los boilies de cebado es la
sobredosis de semillas. Mis boilies llevan mucha comida de pájaros
molida, el típico “birdfood” (como llaman los ingleses), y además añado
una buena cantidad de alpiste para canarios. Sinceramente, resultan muy
difíciles para rularlos en la tabla de boilies y muchas veces tengo que
hacerlos a mano, pero creo que son una bomba atractiva para las carpas.
Digamos que al llevar tanto alimento natural como son estas semillas,
las carpas los aceptarán con más rapidez.
EL MÉTODO DE CEBADO
Seguimos.
Ya sabemos que los cacahuetes, el maíz, el cañamón, etc. Van a ser más
rápidos que los boilies en un embalse donde estos no han sido
introducidos. ¿Cuál es el método que debemos emplear? Yo prefiero
utilizar únicamente boilies en los cebados previos que haga en el
embalse, tanto si llevo dos meses cebando como si solo he ido una vez
entre semana antes de la sesión de pesca. Además,
me inclino por bolies de gran diámetro. Me los hago con una tabla de 24
mm. porque no tengo ninguna de 35 mm. (no existe comercialmente, estoy
estudiando como hacerme una). Las carpas pequeñas no pueden con boilies
tan gruesos y además, como los dejo bastante tiempo al aire libre para
que se endurezcan, aunque estas carpas se los coman no lo hacen con
facilidad, ya que sus dientes faringeos aun no están del todo
desarrollados. Con ello consigo que queden boilies en el cebadero para
cuando pasen por allí las carpas más grandes. Vale, ya se que estáis
pensando que me voy de varas, que el articulo trata de pescar carpas en
un embalse virgen, sea cual sea el tamaño de los peces, pero no puedo
evitar pensar solo en las carpas grandes… será deformación profesional…
Daniel, en cambio, para preparar la zona con antelación prefiere mezclar
los boilies con el maíz, y ceba con mayor volumen de este último. Su
teoría se basa en atraer todo tipo de carpas a un cebadero bastante
cargado de kilos de granos. Fácilmente puede llegar a un embalse con dos
cubos de 15 Kg. cada uno de maíz bien fermentado y 5 Kg. de boilies.
Evidentemente estas cantidades son las más o menos adecuadas para un
embalse con pesca abundante. El mismo día que empezamos a pescar yo si
que cebo con mezcla de bolies y granos. ¿Por qué? Porque ahora tengo
prisa, quiero que las carpas empiecen a picar. Cuando cebo sin pescar me
da igual que un boilie se lo coman ese día o el día siguiente. Pero
cuando quiero pescar, quiero atraer las carpas (que gracias a los
cebados previos no estarán muy lejos) lo más rápidamente posible. El
maíz es consumido por las carpas pequeñas y las grandes seguro que oyen
el festín y se acercan a ver lo que cae. Tanto Daniel como yo
coincidimos en el método empleado para cebar el primer día de pesca,
incluso utilizamos también pienso de piscifactoría, de aroma muy
intenso, para aumentar la atracción del pesquil. Conforme pasan los días
reducimos la cantidad de granos en beneficio de los boilies. De todas
maneras, os volvemos a repetir lo que ya hemos dicho varias veces: el
cebado es un tema muy subjetivo y sujeto a debate. También hay
pescadores que mantienen la opinión de que un cebado mixto de maíz y
boilies hace que las carpas se centren en los granos y no se fijen en
los boilies. Lo que si que hay que evitar es echar demasiadas semillas
pequeñas como el cañamón, por ejemplo, porque las carpas se ciegan con
él y se vuelven locas buscándolo. Ignorarán cualquier otro tipo de
alimento.
¿Y EL ENGODO?
¿Pensabas
que nos habíamos olvidado, eh? Lo hemos dejado para el final, pero no
por eso lo consideramos menos interesante. El engodo utilizado
habitualmente en la pesca al coup o a la inglesa es un método fenomenal
para atraer las carpas a nuestro pesquil. Podemos utilizarlo de varias
maneras, bien haciendo bolas del tamaño de una naranja que dispersaremos
por toda la zona, o bien colocándolo en un plomo feeder. Evidentemente,
no es un elemento que utilizaríamos para cebados previos a la sesión de
pesca, sino que su uso es más adecuado a cuando iniciamos ésta. Un
pesquil con granos de maíz dispersos por todas partes, algo de pienso de
piscifactoría y unas cuantas bolas de engodo, llamará a gritos a todas
las carpas de la vecindad!!! Usar el engodo en un plomo feeder es muy
apropiado para cuando queremos concentrar
el cebado en torno al anzuelo. Tanto Fox, como Sert y otras marcas
conocidas del sector disponen en su catálogo de plomos de estas
características. Los de Fox tienen tres aspas de plástico que permiten
la sujeción del engodo, para que soporte el lance. Sert tiene varios
modelos, desde uno con una malla metálica dentro de la cual podemos
meter el engodo, hasta uno con forma de muelle que cumple la misma
función. Una vez en el fondo el engodo se irá disgregando y conforme la
zona sea visitada por los peces, el movimiento del agua lo levantará,
creando una nube atractiva alrededor del boilie de nuestro anzuelo.
LOS PELLETS
Este
tipo de cebado creemos acabará imponiéndose y tendrá su rincón entre
los métodos favoritos de los pescadores de grandes carpas. Los pellets
son unos cilindros, parecidos al pienso de piscifactoría, que tiene una
mayor solubilidad en el agua que éste. Podemos encontrar pellets que se
deshacen en 30 minutos y otros que tardan 2 horas. Este cebado también
lo aconsejamos para la jornada de pesca y no tanto para los cebados
anteriores. Cuando salieron al mercado, solo los ofrecían en su catálogo
ciertas marcas y los precios resultaban abusivos. Cebar con pellets era
interesante pero nuestro bolsillo nos ponía muchas limitaciones. En la
actualidad hay más marcas que nos lo proponen a precios más asequibles,
sin perder calidad. Nosotros hemos encontrado posiblemente la mejor
relación calidad/precio en los pellets de la marca Carp Max, empresa
italiana que se está introduciendo ahora en nuestro país con precios muy
competitivos. También nos gustan mucho los pellets que comercializa
Eurobaits, que a su prestigio añade unos precios razonables.
EL METODO DE PESCA
En
un embalse virgen, por tanto nuevo para nosotros (si no, ya no seria
virgen…) aun no sabemos en que sector concreto de nuestra pesquera
entrarán mejor las carpas. Podemos haber sondeado el fondo y tener unas
previsiones de cuales pueden ser los mejores puestos, pero hace falta
pescar en ellos para contrastar los resultados. En este sentido, es
mejor hacer un cebado muy amplio, llegando a cubrir bastantes metros
cuadrados. Iremos lanzando las cañas metódicamente: ahora en este sitio,
después al lado de aquel árbol, más tarde en aquella punta, etc. Al
cabo de dos días de pesca habremos tenido cebos colocados en toda la
zona. Si las condiciones climáticas no han cambiado, podemos sacar
conclusiones de que sector es más productivo. Cuando estamos estudiando
de esta manera las posibilidades de un embalse, miramos con envidia a
nuestros colegas franceses, que pueden pescar en algunos embalses hasta
con cuatro cañas. Cada vez nos desesperamos mas con nuestra maravillosa
Ley de Pesca que hace felices a tantos pescadores!!!
LEGISLACIÓN ( Pedro Omarrementeria )
En
la pesca de la carpa, el cebado de las aguas es un capitulo muy
importante en dos aspectos: Por una parte generar una zona querenciosa
para los peces, a base de cebos alternativos y por la otra, darles a
conocer los boilies y que se acostumbren a ellos. No obstante, el cebado
es todo un arte, no una ciencia exacta sometida a muchas variables
diversas y que se trata a fondo en otros capítulos del libro. Veamos
ahora que nos dicen las leyes sobre el cebado de las aguas. El
cebado en las aguas continentales es una materia competente de las
correspondientes comunidades autónomas, que legislan y regulan esta
actividad mediante la publicación anual o fija de las respectivas
órdenes de veda o decretos similares que elaboran las consejerías u
organismos autonómicos responsables de medio ambiente o pesca fluvial en
cada comunidad. La legislación al respecto, es similar para toda
España, incluso la insular, con una sola excepción: Castilla León. Con
esta sola excepción, se autoriza el cebado en aguas no trucheras (las
aguas trucheras se indican expresamente en las ordenes de vedas),
autorizándose asimismo la pesca con asticot. En cuanto a Castilla León,
esta comunidad no autoriza ni el uso de asticot ni el cebado de las
aguas en ninguna masa de agua. Esta prohibición es debida a un excesivo
proteccionismo cautelar de los salmónidos. Estas órdenes de vedas
también regulan los horarios de pesca, prohibiéndola desde una hora
después de la puesta del sol, hasta una hora antes del amanecer, según
el Almanaque. Aquí cabe señalar que extraordinariamente se autorizan
otros horarios más amplios por parte de los organismos provinciales
competentes, cuando se les eleva una petición razonada y debidamente
justificada. Como por ejemplo la junta de Extremadura que ya ha
autorizado varios concursos especiales de 72 horas interrumpidas y que
debe de servir como ejemplo para solicitar y obtener autorizaciones
similares en otras comunidades. Asimismo Extremadura es la única
comunidad que permite la pesca con tres cañas. La
otra autorización especial es la que otorga durante todo el año las
provincias de Cataluña y Aragón donde esta permitida la pesca del siluro
en río Ebro hasta las 24h. Es muy lamentable la protección legal de la
carpa y otras especies, por tratarse de una especie catalogada como
alóctona, aunque habita nuestras aguas desde la época de los romanos. Es
lamentable que la legislación actual este basada en una ley de 1942,
regulada por un decreto de 1943 cuando el concepto de pesca sin muerte
en aquella España de posguerra pudiera sonar a ciencia ficción. El
respeto a la normativa vigente debe de ser un punto fuerte en el
comportamiento del pescador deportivo. Esto no debe de significar que
debamos ser conformistas, así que aprovechemos nuestro derecho a
expresarnos y a hacer todas las gestiones legales para que estas leyes
cambien y evolucionen como el resto de la sociedad. Desde Webcarp
promovemos a modernización de dichas leyes adaptándolas a la pesca
moderna y deportiva de la carpa, no obstante todos debemos aportar
nuestro granito de arena, es decir debemos promulgar nuestra filosofía
de captura y suelta así como la protección de la naturaleza. Solo así
haremos comprender a las autoridades la necesidad de adaptar las leyes a
pescadores respetuosos que no hacen ningún mal y que su único deseo es
pescar.